Las prefieren "maduritas"...

Quizás sea mi encanto natural o que este par de arruguitas que se empiezan a notar son algo sexy… tal vez mi rostro denota experiencia y misterio!!... mmm... ninguna me convence...

Estaba yo desayunando en Sanborns (si, lo odio, pero ahí puedo gastar mis vales de restaurante) y a la mesa de junto llegó un grupo de universitarias de unos 19 años con un muchachito que se veía un poco mayor que ellas, de unos 21 años probablemente, un rato después supe que esperaban a un maestro que aparentemente iba a asesorarlas en alguna materia.

Siendo sincera debo decir que el muchachito era bastante atractivo, muy mi tipo, de ojitos de espía y look de naufrago de 3 días, lo vi, supuse que era novio de una de las jovencitas y seguí trabajando… olvidé decir que había prendido la lap para revisar el correo así que no puse mayor atención a mis vecinos de mesa, me di cuenta de que él se levantó y noté cuando regresó, había ido a comprar el periódico y como aparentemente no estaba involucrado en el asunto que ahí se trataba se puso a leerlo:

Naufraguito (en pose de "que interesante soy")– Ya estoy invadiendo tu mesa (le sirvieron café como si estuviera sentado conmigo)
Yo – No te preocupes no hay problema (sonrisa sonrisa)
Naufraguito – ¿No quieres leer el periódico?
Yo (sonrisa de “que linda soy/¿que chingados quieres?, no ves que estoy ocupada???”) – No gracias, lo estoy leyendo aquí- y señalé la computadora (sonrisa de “eso fue lindo” ^_^)

Como ya había terminado lo que estaba haciendo pedí la cuenta y empecé a guardar mis cosas, entre la plática que intentaban tener al lado, alcancé a escuchar que el invasor era hermano de una de las muchachitas, me levanté para ir a pagar:

Yo – Ahora sí, la mesa es toda tuya
Naufraguito – Ah no, solo quiero un pedacito
Yo… (mirada de Ok, igual yo ya me voy) agarré mis cosas y cuando iba a empezar a caminar...
Naufraguito – Y usted como se llama?
Yo - Chiiiiii%@&# a tu madre!!!! ... aunque en realidad mi boca dijo - Adriana (sonrisa de "yo solo le hablo de usted a mi nana")

Y antes de que mi bilis se derramara o mis arrugas se sintieran orgullosas me largué de ahí...