martes, julio 31, 2007

Mi última voluntad

La muerte siempre me ha causado curiosidad, desde niña me preguntaba como se sentiría, no me da miedo, solo me daría tristeza si tuviera que pasar por una larga y desgastante enfermedad con toda la gente que me quiere sintiendo pena por mí.

Si de algo estoy segura es de cómo quiero mi despedida: Sin velorio, el espíritu para ese entonces se habrá ido, quiero ser cremada directamente después de los trámites legales, puesta en una urna y llevada al mar, la gente que quiera acompañar a mis cenizas deberá ir vestida de blanco y si desean llevar flores serán unicamente blancas.

Mis hermanos vaciaran las cenizas en el agua y todos lanzaran las flores al mar.

Nada de misas ni servicios religiosos, nada de lagrimas ni sentimientos de pesar.